Hoy vamos a hablar de la menopausia y andropausia, estados en los que los cuerpos tanto de hombres como de mujeres sufren importantes cambios. Ambos sexos dejan de producir una serie de hormonas que intervienen en la prevención a nivel vascular. En el caso de los hombres, se deja de producir la testosterona, en el caso de las mujeres, el estrógeno y progesterona.

El sistema circulatorio no es inmune a estos cambios y también están alterados por las alteraciones a nivel hormonal. Al bajar la producción, los problemas en la menopausia y andropausia a nivel arterial aumentan exponencialmente.

¿Qué es la menopausia?

La menopausia es el proceso natural que marca el fin del ciclo reproductivo en la mujer, que se evidencia tras 12 meses consecutivos sin menstruación. Durante esta etapa, los ovarios reducen gradualmente la producción de hormonas esenciales, como el estrógeno y la progesterona, lo que desencadena cambios en el organismo.

Estos cambios hormonales pueden dar lugar a síntomas variados, desde sofocos y alteraciones en el sueño hasta cambios en el estado de ánimo y modificaciones en la manera en la que se distribuye la grasa corporal. La transición a este estado, conocida como perimenopausia, suele comenzar entre los 45 y 55 años y puede durar varios años, permitiendo que el cuerpo se adapte poco a poco a las nuevas condiciones hormonales.

Aunque la menopausia no es una enfermedad, sí implica ajustes fisiológicos que pueden influir en la salud ósea, cardiovascular y metabólica, por lo que tener hábitos saludables de vida durante esta época es de gran ayuda para mitigar sus efectos.

Menopausia síntomas

La menopausia y la etapa previa conocida como perimenopausia pueden venir acompañadas de una amplio número de síntomas, tanto físicos como emocionales, producto de la fluctuación y disminución de las hormonas sexuales. Durante este periodo de transición, que puede extenderse entre 2 y 8 años, es común experimentar variaciones en los ciclos menstruales, que pueden volverse irregulares o incluso ausentes temporalmente. Podemos catalogar los síntomas de la menopausia de la siguiente forma:

  • Irregularidades menstruales: Ciclos más cortos, irregulares o ausencia temporal de menstruación.

  • Síntomas físicos:

    • Sofocos y sudoraciones nocturnas.
    • Sequedad vaginal.
    • Dolores articulares y musculares.
    • Cambios en la piel y el cabello.
    • Aumento de peso y cambios en el apetito.
  • Síntomas emocionales:

    • Cambios de humor (irritabilidad, ansiedad, tristeza).
    • Trastornos del sueño e insomnio.
    • Fatiga y dificultades de concentración.

Seguir un estilo de vida saludable (con ejercicio regular, una alimentación equilibrada y un buen descanso) puede ayudar a mitigar estos síntomas de la menopausia.

¿Qué es la menopausia?

Andropausia ¿En qué consiste?

La andropausia es un proceso natural en el que a medida que los hombres envejecen, viven una disminución progresiva en los niveles de testosterona. También se conoce como hipogonadismo tardío, climaterio masculino o síndrome de déficit de testosterona. Este descenso hormonal, que suele notarse a partir de los 40 años y se acentúa después de los 50, puede llegar a afectar diversas áreas de la salud:

  • En la capacidad sexual, con una disminución del deseo y dificultades para lograr o mantener una erección.

  • En la composición corporal, con la reducción de la masa muscular, aumento de la grasa corporal y disminución de la densidad ósea.

  • En aspectos mentales y emocionales, al tener más fatiga, depresión, irritabilidad, problemas de concentración y pérdida de memoria.

  • Y otros efectos, que impactan en la función metabólica, cardiovascular y reproductiva.

Aunque no existe un tratamiento específico para la andropausia, los síntomas pueden ser aliviados mediante cambios en el estilo de vida y, en algunos casos, con terapias hormonales supervisadas por un médico.

Andropausia síntomas

La andropausia puede manifestarse de forma progresiva y variable, con síntomas físicos y psicológicos que difieren en intensidad entre los hombres:

  • Síntomas físicos de la andropausia:

    • Disminución de la energía y la fuerza muscular.
    • Aumento de la grasa corporal.
    • Reducción de la libido.
    • Dificultades para lograr o mantener una erección.
    • Menor fuerza y volumen en la eyaculación.
    • Problemas de fertilidad.
    • Pérdida de altura.
    • Sequedad en la piel y el cabello, caída del mismo y aparición de canas.
    • Sofocos, sudoración o escalofríos.
    • Disminución progresiva de la densidad ósea (osteoporosis).
    • Estreñimiento.
  • Síntomas psicológicos de la andropausia:

    • Cambios de humor: depresión, irritabilidad, ansiedad o angustia.
    • Dificultades para concentrarse y pérdida de memoria.
    • Alteraciones del sueño, aumento de la somnolencia y fatiga.

Si observas algunos de estos síntomas, es recomendable consultar con un especialista para una evaluación adecuada.

¿Qué es la menopausia?

¿Por qué en la menopausia los problemas cardíacos se empiezan a equiparar en ambos sexos?

Los hombres, con la bajada de testosterona, ven aumentado el riesgo de padecer enfermedades cardiovasculares. Esto es debido a que la testosterona está muy ligada al envejecimiento.

En la mujer, el estradiol, que es la hormona femenina, ejerce un papel importante previniendo de las cardiopatías. Por eso, en las mujeres son menos frecuentes los infartos y las anginas de pecho con respecto a los hombres durante la edad fértil.

Si a la falta de estrógenos, que aumenta el colesterol, le añadimos el proceso de envejecimiento, se debe ir con cuidado. Ya que, estamos en una época con factores nefastos a nivel cardiaco al que se unen hipertensión y aumento de la tendencia a la diabetes.

¿Qué podemos hacer para conservar nuestro sistema circulatorio?

Lo más importante para nuestra salud es mantener una buena circulación. Existen varias formas en las que conseguir esto:

  • Con ejercicio diario, al caminar entre 3 y 4 kilómetros al día, ya que esto ayuda a activar todo el sistema vascular, contribuye al gasto calórico y fortalece la musculatura.

  • Seguir una dieta equilibrada, ya que una alimentación saludable favorece la función cardiovascular y ayuda a mantener el peso adecuado.

  • Beneficiarse de terapias complementarias, sobre todo en casos donde la actividad física se ve limitada, y en dónde técnicas como la presoterapia pueden estimular la circulación y prevenir problemas en venas y arterias.

Implementar estas prácticas a estas edades puede marcar una gran diferencia en el mantenimiento de un sistema circulatorio saludable.

¿Por qué se aumenta de peso durante la menopausia y la andropausia?

Los cambios hormonales durante la menopausia y la andropausia influyen en la distribución de la grasa corporal, concentrándola más en el abdomen que en otras zonas como muslos o caderas. Esto se debe a varios factores:

  • A la disminución de la masa muscular, dado que con la edad, el músculo se reduce y es reemplazado por grasa. Esto hace que el cuerpo requiera menos energía, lo que da como resultado un metabolismo más lento.

  • Un menor gasto calórico, al consumir la misma cantidad de calorías sin un aumento en el ejercicio, el exceso energético se almacena, favoreciendo el aumento de peso.

Por todo esto, la combinación de la redistribución de la grasa y la reducción del metabolismo contribuye al aumento de peso durante la menopausia y la andropausia, especialmente si no se incrementa el nivel de actividad física, que sería el consejo más importante.

Adelgazar en la menopausia

No existen soluciones mágicas para perder peso durante la menopausia, pero sí es posible mejorar el estilo de vida para prevenir este aumento y favorecer la pérdida de peso en la menopausia.

  • Aumentar la actividad física:

    • Combinar ejercicios aeróbicos con entrenamiento de fuerza. Esto ayuda a quemar más calorías y a incrementar la masa muscular, lo que mejora el metabolismo.
  • Ajustar la ingesta calórica diaria:

    • A partir de los 50 años, el cuerpo tiende a requerir alrededor de 200 calorías menos al día. Adaptar la dieta a esta nueva necesidad puede ayudar a evitar el exceso calórico.
  • Regular tanto el consumir de azúcares como de alcohol:

    • Limitar el consumo de alimentos y bebidas con alto contenido en azúcares y alcohol, ya que aportan calorías vacías sin beneficios nutricionales.

Con estos cambios en la rutina diaria, es posible fomentar un estilo de vida saludable y facilitar la pérdida de peso en la menopausia.

Adelgazar en la menopausia

Beneficios de la presoterapia en la andropausia y la menopausia

La presoterapia es una técnica no invasiva que puede complementar el estilo de vida saludable durante las etapas de andropausia y menopausia,  ayudando a mitigar algunos de los síntomas asociados a los cambios hormonales. La presoterapia ayuda en:

  • La mejora de la circulación, al estimular el flujo sanguíneo y linfático, facilitando la eliminación de toxinas y mejorando la oxigenación de los tejidos.

  • La reducción de la retención de líquidos, al disminuir la hinchazón y el edema, lo que puede aliviar molestias en piernas y otras áreas afectadas por la mala circulación.

  • La estimulación del metabolismo, ya que al favorecer una mejor circulación, puede contribuir indirectamente a activar el metabolismo, apoyando el control del peso.

  • Al alivio de dolores musculares y articulares, gracias a que una mayor oxigenación y eliminación de desechos metabólicos pueden reducir la sensación de dolor y rigidez, comunes en estas etapas.

  • La mejora en la apariencia de la piel, dado que la eliminación de toxinas y el incremento en la circulación pueden proporcionar una piel más luminosa y saludable.

Integrar la presoterapia en una rutina que combine tanto el ejercicio regular, como una alimentación equilibrada y un seguimiento médico adecuado, puede ayudar a mejorar la calidad de vida durante la menopausia y la andropausia, aliviando síntomas y fortaleciendo el sistema circulatorio.

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La menopausia suele aparecer entre los 45 y 55 años, siendo el promedio alrededor de los 51 años. Sin embargo, la edad exacta puede variar según factores genéticos y de estilo de vida de cada mujer.

La transición a la menopausia, conocida como perimenopausia, puede extenderse y tener una duración media de entre 2 y 8 años. La menopausia se “confirma oficialmente” cuando no se presenta ninguna menstruación durante 12 meses consecutivos.

No, los sofocos de la menopausia no adelgazan, ni provocan ninguna pérdida de peso; de hecho, pueden incluso estar asociados con un aumento de peso. Durante la menopausia, la disminución de estrógenos afecta la capacidad de metabolizar las grasas, lo que dificulta la quema de calorías y puede favorecer la acumulación de grasa, especialmente en el área abdominal.
Consejos para controlar el peso en la menopausia:

  • Realizar ejercicio físico de manera regular.
  • Llevar una dieta equilibrada, priorizando alimentos ricos en fibra (frutas, verduras, granos integrales) y legumbres.
  • Evitar el consumo de alcohol y de hidratos de carbono de rápida absorción.
  • Mantener horarios regulares de comida, ejercicio y descanso.

No existe un momento específico en el que se «deje» de engordar en la menopausia, ya que el aumento de peso depende de cómo se adapta el cuerpo a los cambios hormonales y de los hábitos de vida adoptados. Con un estilo de vida saludable, que incluya ejercicio regular, alimentación adecuada y evitar hábitos nocivos, se puede controlar este aumento de peso y, en muchos casos, llegar a reducir el aumento de peso asociado a la menopausia.

Podemos diferenciar fácilmente los 7 signos y síntomas de la andropausia más comunes y que experimentan más hombres:

  1. Disminución de la libido.
  2. Dificultades para lograr o mantener una erección.
  3. Reducción de la masa muscular.
  4. Aumento de la grasa corporal.
  5. Fatiga y pérdida de energía.
  6. Cambios en el estado de ánimo (como depresión, irritabilidad o ansiedad).
  7. Dificultades para concentrarse y pérdida de memoria.

La andropausia suele comenzar a manifestarse a partir de los 40 años, siendo más evidente a partir de los 50. Al igual que en la menopausia, puede variar en función de cada hombre, y depende de factores tanto hormonales como del estilo de vida particular de cada uno.

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