¿Conoces los beneficios y los riesgos del drenaje linfático en el embarazo?
Durante el embarazo el cuerpo sufre cambios que afectan directamente a la circulación de retorno. También, se aumenta de peso, cosa que influye negativamente en el retorno venoso, que se dificulta al añadir el volumen del feto.
Debido a esto, durante el embarazo es común tener la sensación de dolor e hinchazón en las piernas. El aumento de peso y la curvatura hacia delante, que se vuelve habitual en la gestante, también puede causar dolor de espalda a nivel lumbar o dorsal.
El drenaje linfático en el embarazo es un aliado para rebajar estos problemas. En una técnica de masaje destinado a abrir las válvulas linfáticas para que el acúmulo de líquido en la extremidad sea propulsado al interior de los vasos linfáticos y poder ser eliminado. Se realiza con unas manipulaciones muy superficiales que hacen salir los acúmulos nocivos de las zonas más cargadas hacia áreas activas a nivel linfático. Es sabido que el sistema linfático forma parte esencial del sistema circulatorio y se encarga de transportar las toxinas del organismo, así como de mantener el equilibrio del sistema inmunitario.
Cualquier técnica de masaje, ya sea manual o con aparatología debe realizarse pasados los tres primeros meses de gestación para evitar posibles riesgos.
Beneficios del drenaje linfático para embarazadas
El drenaje linfático tiene importantes beneficios en todo el mundo, y en el caso de las embarazadas adquiere mayor importancia.
Entre los beneficios del drenaje linfático para embarazadas podemos destacar:
- En la embarazada es muy importante el sistema inmunológico. El sistema linfático es el encargado de transportar linfocitos, que son los encargados de las defensas del organismo. Con el drenaje se mejora la producción de linfocitos, la calidad de estos y el transporte. En consecuencia, aumenta la defensa contra infecciones y virus.
- El drenaje mejora la circulación de retorno, tanto sanguíneo como linfático por lo que aumenta la regeneración y renovación linfática.
- Al movilizar, eliminar linfa, se pierde volumen y disminuye la compresión de las terminaciones nerviosas. Lo que es lo mismo, disminuye el dolor de las piernas sobretodo.
- Incrementa la velocidad de evacuación de las toxinas, el funcionamiento de los riñones y la micción.
- El drenaje linfático también actúa sobre el sistema nervioso por lo que con las maniobras de movilización se obtiene una reducción del estrés y aumento del estado de relajación.
Riesgos y contraindicaciones del drenaje linfático durante el embarazo
Si bien las molestias pueden aparecer más tarde, el drenaje linfático se recomienda a partir del 4º mes. Todo y así, es importante tener en cuenta que pueden ocasionar alteraciones en la madre por lo que hemos de valorar ciertas contraindicaciones.
Entre ellas podemos destacar:
- Realizar presión en la zona abdominal.
- En el embarazo son frecuentes las alteraciones en la tensión. Evitar la presoterapia o masajes cuando haya alteración de tensión arterial, hipertensión o hipotensión.
- Trombosis, tromboflebitis, cualquier tipo de infección son especialmente contraindicado el uso de presoterapia o drenajes manuales.
- Si bien es tener ciertos problemas cardiacos es una contraindicación a nivel general en embarazadas hay que extremar los cuidados
- Problemas arteriales ya sea tendencia al aneurisma, arterioesclerosis…
¿Se pueden usar equipos para el drenaje linfático durante el embarazo?
La presoterapia Ballancer® es uno de los equipos más recomendados para realizar el drenaje linfático por compresión neumática. De hecho, es uno de los pocos equipos que no están contraindicados o prohibidos durante el embarazo. A tener en cuenta que se debería realizar con la recomendación o supervisión de un especialista médico.
La presoterapia actúa sobre la extremidad ejerciendo una secuencia de compresiones determinadas por el modo de masaje o ciclo escogido. Cada modo de masaje o ciclo va destinado a un problema concreto:
- Cuando trabajamos en secuencial buscamos el drenaje linfático profundo. De esta manera eliminamos exceso de agua, sustancias del tejido adiposo de gran calibre, bacterias etc.
- Si lo hacemos en modo peristáltico recuperamos el retorno venoso, que aparte de mejorar la circulación de retorno, evita la aparición de varices, mejora la apariencia de la piel, la nutre para evitar en lo posible la aparición de estrías…
También, es importante el uso de la presoterapia para evitar o reducir el riesgo de aparición de celulitis, de la pesadez de las piernas y por congestión la aparición de edemas. Durante el embarazo es importante escoger bien el modo de ciclo para evitar posibles riesgos a nivel cardiaco, arterial etc.
Cómo actúa la presoterapia
Como su nombre indica, la presoterapia es un masaje compresivo realizado por un compresor que infla una serie de celdas o cámaras dispuestas a lo largo de la extremidad mediante una prenda. En el caso de la presoterapia Ballancer® la prenda es un pantalón y las celdas están muy montadas una sobre otra para que toda la extremidad reciba la misma cantidad de presión.
Aunque no parezca importante, es vital, sobretodo en el embarazo que no haya zonas en las que se pueda estancar sangre o linfa. Es por ello que se han de solapar mucho las celdas para que toda la zona reciba la misma presión. Aunque la prenda es un pantalón en la zona abdominal no se debe realizar compresión por lo que las celdas correspondientes al abdomen se han de anular.
El tipo de masaje escogido ha de ser suave, de ola superficial que imita al drenaje manual tanto en presión como en tiempo de compresión y de relajación para no sobrecargar los diferentes órganos de la embarazada, ya sobrecargados por la gestación.
Las sesiones no deberían de sobrepasar los 30 minutos por norma. En casos más extremos, con gran cantidad de edema se pueden ajustar los tiempos según la recomendación del obstetra o el ginecólogo que determinará cada caso. También determinarán si fuera necesario, una frecuencia mayor de sesiones si las 2 recomendadas resultasen insuficientes. El tratamiento se puede alargar hasta días antes del parto si fuera necesario.
La presoterapia efectúa un masaje direccional de distal a proximal. Este masaje hace llegar el líquido cargado de toxinas, moléculas proteicas y excedente linfático desde el pie hacia la ingle, donde encontramos la cadena de ganglios linfáticos inguinales. De aquí llegará a cisterna de Pecquet o cisterna de quilo que se encuentra delante de la segunda vértebra lumbar. Posteriormente se unirá a la sangre a nivel de la subclavia.
A la vez que se canalizas los excedentes linfáticos como hemos explicado, la presoterapia también drena los excedentes venosos habituales en las embarazadas.
Durante el embarazo, los cambios a nivel hormonal y físico como el aumento de peso o el entorpecimiento del retorno venoso por el volumen que ocupa el feto, favorecen el estancamiento venoso. Como consecuencia la aparición de venas varicosas y edemas. Por lo tanto, la presoterapia ayuda a drenar tanto el excedente de linfa como el de sangre, aliviando el dolor de las piernas, la hinchazón, la retención de líquidos y en lo posible el acúmulo de lípidos que da lugar a la celulitis.
Podemos notar su efectividad si cuando se acaba la sesión tenemos la necesidad de ir al baño, aunque hay casos que tarda algo más la sensación, pero finalmente se evacua el excedente de líquido. La sensación es de descanso en las piernas, y mejora en la tirantez de la piel. También obtenemos un efecto sedante y de relajación general. Con constancia se reduce el riesgo de aparición de varices y celulitis.
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