El cáncer de mama es un tipo de cáncer que se forma en las células de las mamas.

En este post expondremos las cifras de incidencia, la mortalidad, prevalencia y supervivencia. Así como del linfedema como efecto secundario del cáncer de mama.

Incidencia del cáncer de mama

El  cáncer de mama junto con los cánceres de piel son los más frecuentes entre las mujeres en el mundo.

En concreto, en la sociedad española durante el pasado año se han diagnosticado 33.307 casos nuevos según la AECC. Esto significa aproximadamente el 30% de los casos de tumores en mujeres de nuestro país.

Existe una mayor incidencia entre las mujeres con edades comprendidas entre los 45-65 años. Pero es a partir de los 75 años cuando aumenta exponencialmente el número de casos diagnosticados.

Cabe recalcar que en España no se dispone de un sistema nacional de registro de tumores. Pero, en la AECC concluyen que el número de casos aumentan lentamente a nivel mundial. Esta tendencia, se cree que es divida al envejecimiento de la población.

Actualmente, la tasa de incidencia es de 138 casos por cada 100.000 habitantes.

Se estima que 1 de cada 8 mujeres corren el riesgo de padecer cáncer de mama a lo largo de su vida.

Tasa de mortalidad del cáncer de mama

En España tenemos una de las tasas más bajas de mortalidad por cáncer de mama, 28 por cada 100.000 habitantes. A pesar de esto, es la primera causa de muerte entre mujeres con cáncer. Esto supone un 17% de las mujeres con cáncer y un 3,3% del total de muertes femeninas.

La mayor parte de los casos se dan en mujeres mayores de 75 años. Datos del Observatorios de AECC datan en 3.182 personas de esta edad.

Pero, aunque el número de casos aumenta, afortunadamente el número de fallecimientos por esta causa permanece estable. La tasa de fallecimientos está descendiendo poco a poco debido a la detención precoz y los tratamientos. Estos tratamientos son más eficientes y tienen menos efectos secundarios.

Linfedema y linfadenectomía

Un linfedema es la acumulación anormal de líquido en el tejido blando debido a una obstrucción en el sistema linfático.

Una linfadenectomía es la extirpación de un número de ganglios linfáticos. En caso de mujeres con cáncer de mama es habitual que se precise este tipo de intervención. En estas mujeres es normal el linfedema en el brazo que se produce por la interrupción de la circulación linfática a nivel de la axila. Como consecuencia de esta resección, el drenaje de la linfa excede la capacidad de los vasos. Y, es por esto, que se acumula inflamando la extremidad.

Si además de la linfadenectomía requieren tratamiento de radioterapia en la zona axilar, aumenta bastante la posibilidad de linfedema.

Este linfedema es un trastorno crónico y progresivo. Para tenerlo bajo control es imprescindible el tratamiento precoz y la prevención.

Grados de linfedema en casos de cáncer de mama 

La “inflamación” o “edema” que, por lo general, aparece en uno de los brazos o de las piernas, puede clasificarse en varias fases:

Estadio I o infraclínico: 

El Estadio I o infraclínico sólo se ve por linfografía (contraste en el interior de los vasos). Suelen ser pacientes que comentan pesadez en la extremidad, pero todavía no hay diferencia en la circunferencia de ambos brazos.

Estadio II: 

En el Estadio II este edema ya es visible, pero se revierte elevando el brazo en reposo. Aquí ya necesita rehabilitación fisioterapéutica o tratamiento de presoterapia de inmediato para evitar que evolucione.

Estadio III: 

en el Estadio III es irreversible. En este momento, no cambia ni mejora con el brazo elevado en reposo. En este estadio, es imprescindible seguir con el tratamiento de fisioterapia y/o presoterapia

Estadio IV: 

En el Estadio IV ya irreversible. En este estadio, se detectan cambio en la piel, fibrosis… En este momento, es imprescindible seguir con los tratamientos de fisioterapia y/o presoterapia.

Aproximadamente 1 de cada cuatro mujeres padecerán linfedema. No en todos los casos surge en el mismo plazo de tiempo, puede tardar años en producirse o bien de forma inmediata. Lo más frecuente es que el 75% de los casos aparezcan durante el primer año tras la cirugía.

Tratamiento del linfedema 

El tratamiento está compuesto por:

• Drenaje linfático manual o con presoterapia
• Vendaje compresivo

El drenaje linfático, manual y con presoterapia, sin vendajes no es eficaz, al igual que los vendajes sin drenaje linfático. Será el fisioterapeuta quien adapte el tratamiento en cada caso y controle el linfedema combinando drenaje más vendajes de forma óptima.

El tratamiento debe ser diario en muchas ocasiones hasta que se haya controlado el problema.

Existen algunas situaciones en las que no se debe realizar drenaje y vendaje de la hinchazón.

Cuando el edema empieza a ser importante, es imprescindible el uso de equipos de presoterapia para eliminar de una manera más rápida y eficaz el excedente de linfa.

Existen prendas especialmente diseñadas para mastectomizadas.